Suiza va a someter a una consulta popular si introduce una renta básica para todos los adultos, una señal más del creciente activismo público debido a la desigualdad de ingresos desde que estalló la crisis financiera.

Un comité está pidiendo que todos los adultos en Suiza reciban por mes del Estado un ingreso incondicional de 2500 francos suizos (unos 2800 dólares), con el objetivo de ofrecer una red de seguridad financiera a la población.

Los organizadores presentaron ayer las más de 100.000 firmas que se necesitan para convocar un referendo y volcaron el contenido de 8 millones de monedas de 5 francos de un camión en el exterior del edificio del Parlamento en Berna, una por cada habitante de Suiza.

Según la ley suiza, los ciudadanos pueden organizar iniciativas populares que conviertan la indignación o el enojo de los ciudadanos en una acción política directa. El país suele celebrar varios referendos por año.

En marzo, los suizos votaron respaldar uno de los controles más estrictos del mundo sobre la remuneración de los ejecutivos, lo que obliga a las compañías públicas a dar a sus accionistas un voto vinculante como compensación.

En tanto, una propuesta para limitar el salario mensual de los ejecutivos a no más de lo que cobra el trabajador peor pagado de la compañía en un año -denominada iniciativa 1:12- se somete a votación popular el 24 de noviembre.

El comité organizador de la nueva iniciativa dijo que la renta básica podría financiarse en parte a través del dinero de los sistemas de seguridad social del país. El momento de la votación aún se tiene que anunciar, a la espera de la recomendación oficial del Gobierno.