El propietario de "News Corp", Rupert Murdoch, declaró ante la comisión del Parlamento británico que investiga el escándalo de escuchas telefónicas y sobornos a policías que sacude la política y los medios en Reino Unido. Murdoch y su hijo James, que también estaba citado a declarar ante los Comunes, lamentaron "profundamente lo ocurrido" y aseveraron que se avergüenzan de ello, pero adujeron que "no son los únicos responsables".

"Hoy es el día de mayor humillación de mi vida", afirmó el magnate, y añadió que, ante los hechos, reaccionó de forma "rápida" y "transparente". Además, subrayó que "News of the World", representaba "sólo un uno por ciento" de su imperio, con lo que quiso connotar que los casos no llegaron a un nivel en el que él llegara a estar informado de las maniobras.

Así, echó toda la culpa a sus lugartenientes en el periódico sensacionalista cerrado hace pocos días. La comparecencia de Murdoch es seguida con gran interés en el Reino Unido y es uno de los actos de mayor relevancia llevado a cabo por la comisión parlamentaria fundada en 1979. El poder de la comisión parlamentaria es sin embargo limitado, ya que sólo puede emitir recomendaciones y no puede exigir declaraciones bajo juramento.