El presidente uruguayo admitió desde Venezuela, donde participó de la asunción del presidente venezolano, Nicolás Maduro, que sus dichos sobre la Presidente y el ex mandatario Néstor Kirchner fueron "durísimos".

Dijo que el clima con el gobierno argentino es bueno, y que el comunicado enviado desde la cancillería como respuesta a sus declaraciones “fue durísimo" porque lo que él dijo "fue durísimo". "Está bien”, reconoció.

Asimismo, el líder uruguayo se refirió a la Presidente y dijo: “Para manejar semejante país con esa sociedad tiene un dilema entre terquedad y firmeza. Eso es admirable porque no hay que olvidarse que es una mujer y estamos en un mundo machista. Si no tuviera ese carácter probablemente la pasen por arriba”.

Sobre la relación con la Argentina tras los polémicos dichos, Mujica señaló que “esas son cosas que en una relación de Estado no tienen la importancia que se le atribuyen". "Uno cuando está gobernando tiene que ubicarse en la conveniencia de las naciones, no estamos para las relaciones públicas. Nos pasan todos los días estas cosas”, añadió.

Asimismo, remarcó la importancia del diálogo permanente con la Argentina: “Uno tiene que entender que Argentina está pagando precios de la crisis del 2002 todavía. A veces nos olvidamos, obviamente el pueblo argentino también se olvidó ya”. Esto “obliga a tomar medidas que nos afectan (…) pero hay que bancarlas”.

Para Mujica, "funcionaron mejor algunas cosas después que antes (del micrófono abierto)”. “Con Argentina tenemos que dialogar siempre, ¡siempre! Y nos escuchan hasta donde pueden. La situación de Martín García se viene arreglando, notoriamente. Hay que dar otros pasos, ahora tenemos que ir al río Uruguay, y mañana van a ser otras cosas", publicó el diario El Observador.