Cincuenta y un reclusos han muerto durante un motín en una prisión de la ciudad colombiana de Tuluá en uno de los peores incidentes recientes de este tipo en el país.

 El director de la agencia penitenciaria nacional dijo que se había iniciado un incendio durante una protesta de los presos durante la noche.  “Es un hecho trágico y nefasto”, dijo el martes el general Tito Castellanos a Caracol Radio. “Hubo una situación, aparentemente un motín, los presos prendieron unos colchones y se produjo un incendio que lamentablemente provocó la muerte de 49 presos”.

 Más tarde dijo que otras dos personas habían muerto después de ser llevadas al hospital. Otras 30 personas resultaron heridas, dijo, y decenas fueron evacuadas.

 La prisión en la ciudad suroeste tiene 1.267 reclusos. El bloque de celdas donde ocurrió el incendio alberga 180.

 Las cárceles colombianas están muy sobrepobladas, con capacidad para 81.000 personas pero albergando a unas 97.000, según cifras oficiales.

 El presidente del país, Iván Duque, quien se encuentra de visita en Portugal, tuiteó que se investigará el incidente. “Lamentamos los hechos en el penal de Tuluá, Valle del Cauca. Estoy en contacto con Castellanos y he dado instrucciones para adelantar investigaciones que permitan esclarecer esta terrible situación”, escribió.

 Colombia liberó a algunos presos durante la pandemia de coronavirus después de que más de 20 reclusos murieran durante las protestas de 2020 contra las condiciones de hacinamiento y la falta de servicios.

La violencia carcelaria “obliga a reimaginar por completo la política penitenciaria hacia la humanización de la cárcel y la dignificación del recluso”, dijo el presidente electo, Gustavo Petro, quien asumirá el cargo en agosto .

 Cientos de personas han muerto en las cárceles del vecino Ecuador el año pasado, en lo que el gobierno dice que es violencia relacionada con la rivalidad entre bandas de narcotraficantes, que no ha logrado sofocar. Muchas prisiones en América Latina están severamente sobrepobladas.