En Libia, se estima que ya hay más de trescientos muertos por las protestas contra el presidente Muammar el-Gaddafi.

El mandatario confirmó, desde la capital Trípoli, que continúa ejerciendo el poder.

Con ello, echó por tierra la versión de que se había escapado a Venezuela.

Mientras tanto, el Ejército libio bombardeó a los manifestantes.

Intenta recuperar el control de varias ciudades y reiteró que “ganará esta guerra y terminará con los elementos sediciosos”.

Por el conflicto, sigue la caída de las bolsas y la suba del petróleo, el oro y la plata.

Este martes, se reunía el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para debatir la situación en la nación norafricana.