El uso del software espía Pegasus debería prohibirse en la Unión Europea aconsejó el organismo de control de datos del bloque, ya que es un "cambio de juego" que ofrece poderes sin precedentes para entrometerse en la vida de los objetivos.

El supervisor europeo de protección de datos (EDPS) dijo que era necesaria una prohibición ya que el software, desarrollado por el grupo israelí NSO, podía convertir en secreto un teléfono móvil en un dispositivo de vigilancia.