La Corte Suprema británica habilitó la extradición a Suecia del fundador de Wikileaks, Julian Assange, donde tiene un caso abierto por delitos sexuales.

Es un duro revés para el periodista que llegó al máximo tribunal del Reino Unido tras apelar dos fallos similares y que ahora tendrá dos semanas para pedir la reapertura del caso o llevarlo al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

El activista sueco fue arrestado por Interpol en el Reino Unido en diciembre de 2010 por dos órdenes de captura en Suecia basadas en presuntos delitos de violación a una mujer y de acoso sexual a otra.

Assange no estuvo presente en la sala donde el presidente de la Corte, el lord Nicholas Phillips, leyó la decisión que, según aclaró, no es un juicio de valor sobre las acusaciones.

El punto más difícil que tuvo que resolver la Corte es si, como ocurrió en este caso, un fiscal público y no un juez, tiene el derecho de ordenar una extradición. Por 5 votos a favor y 2 en contra, el tribunal se basó en la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados para hacer una interpretación francesa del Acta de Extradición europea firmada en 2003, que habilita a cualquier “autoridad judicial” a realizar la solicitud.

En ese sentido, Phillips manifestó que consideran al fiscal una “autoridad judicial” y, por lo tanto, dieron luz verde al pedido de Suecia.

La abogada defensora de Assange manifestó que ninguna de las partes ni la propia Corte informó previamente sobre la posibilidad de tomar en cuenta la Convención de Viena, por lo que pidió dos semanas para estudiar si solicitan la reapertura del caso.

Es un pedido inusual que tiene como uno de los últimos antecedentes la decisión del Comité de Apelaciones de la Cámara de los Lores que en 1998 anuló su dictamen anterior que habilitaba la extradición del dictador chileno Augusto Pinochet, pero solamente por delitos de tortura y conspiración cometidos después de 1988.

Otra carta que tiene Assange es llevar su caso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos en la ciudad francesa de Estraburgo, la máxima autoridad judicial que tiene el continente para la garantía de libertades fundamentales.

Los partidarios del fundador de Wikileaks temen que de ser extraditado a Suecia pueda de allí ser enviado a Estados Unidos por la filtración de documentos clasificados del país.

El propio Pentágono denunció a Assange por la publicación de información sobre la guerras de Irak y Afganistán. Desde su detención, Assange está con arresto domiciliario en la residencia de un simpatizante en el este de Inglaterra.