La costa este de Estados Unidos afronta hoy su jornada más fría en cuatro décadas, con una caída histórica de las temperaturas que, junto al intenso viento, provocará una sensación térmica de hasta 50 grados bajo cero. Esta intensa ola de frío, provocada por un "vórtice polar", alcanzará su apogeo entre la noche de hoy y mañana.

El miércoles las temperaturas recuperarán los niveles normales de esta época, e incluso podrían subir más de lo normal para enero durante el fin de semana. El "vórtice polar" es un ciclón de aire muy frío situado normalmente en el norte de Canadá, pero que estos días se desplazó hacia el sur acompañado de fuertes ráfagas de viento. Este fenómeno llevó la alarma al noreste y el medio oeste norteamericano, donde se cerraron escuelas, cancelaron miles de vuelos, y recomendaron a los habitantes que, en la medida de lo posible, no salgan de sus casas.

Este severo frente frío afecta a 140 millones de personas de 26 estados y provocó ya unas 4.000 cancelaciones de vuelos, más de 9.000 retrasos, miles de cortes de luz, y más de una decena de muertes, de manera directa o indirecta. El frío que afrontará buena parte del país durante las próximas horas es tal que incluso los osos polares y los pingüinos de los zoológicos de algunas ciudades como Chicago fueron abrigados para protegerlos de las bajas temperaturas.