Las autoridades ecuatorianas han llevado a cabo una serie de operativos en respuesta al incremento de la violencia relacionada con el narcotráfico en el país. Desde la declaración de un "conflicto armado interno" contra bandas del narcotráfico, se han realizado 85 operaciones contra grupos considerados terroristas, resultando en la detención de más de 3.000 personas. Entre los detenidos, 158 han sido acusados de presunto terrorismo.

En uno de los operativos más significativos, el Ejército ecuatoriano descubrió cerca de 22 toneladas de clorhidrato de cocaína en la provincia de Los Ríos. El valor de la droga incautada es considerable, y se estima que estaba destinada para su transporte a diferentes destinos internacionales.

Además del decomiso de drogas, se confiscaron grandes cantidades de dinero en efectivo, combustible, explosivos, armas de fuego, armas blancas, así como vehículos, motocicletas y embarcaciones. Estos hallazgos revelan la magnitud de la operación y la influencia de las organizaciones criminales en Ecuador.

La fuga de líderes de bandas delictivas, como Adolfo Macías y Fabricio Colón Pico, ha generado una ola de violencia en el país. Ante esta situación, el presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, declaró el estado de excepción por 60 días, movilizando a las fuerzas militares para garantizar la seguridad y el orden público.

El Plan Fénix de seguridad implementado por el Gobierno ha resultado en varios enfrentamientos, la recaptura de presos fugados y la liberación de policías secuestrados. Asimismo, se ha actualizado la lista de los más buscados, incluyendo a los líderes de las bandas delictivas.

Para financiar la lucha contra el narcotráfico, el presidente ha propuesto un aumento del IVA del 12% al 15%, una medida que está siendo discutida en el Congreso. Ecuador, ubicado entre importantes productores de cocaína como Colombia y Perú, se ha convertido en un punto estratégico para la distribución de drogas hacia Estados Unidos y Europa.

En respuesta a esta situación, varios países de la región han anunciado la creación de una red de seguridad interfronteriza para combatir las actividades de las bandas transnacionales. Este esfuerzo conjunto busca abordar el problema del narcotráfico que afecta a múltiples países de la región.