El expresidente francés Nicolas Sarkozy fue condenado en un juicio de apelación por la financiación ilegal de su campaña electoral para las elecciones de 2012. La pena impuesta fue de seis meses de prisión de cumplimiento obligatorio y seis meses exentos de cumplimiento. Esta condena es inferior a la dictada en una instancia anterior, pero superior a lo pedido por la Fiscalía. Sarkozy aún puede apelar ante el Tribunal Supremo, lo que le evitaría, por el momento, ir a prisión.