Un trágico suceso sacudió este viernes a la ciudad de Moscú, específicamente en la sala de conciertos Crocus City Hall, donde al menos 40 personas perdieron la vida y decenas resultaron heridas en un tiroteo. Según informes de medios rusos como Novaya Gazeta y Moscow Times, hombres con ropa de camuflaje iniciaron el tiroteo, desencadenando una evacuación urgente del edificio.

El incidente se vio acompañado por un fuerte incendio en el complejo donde se ubica la sala de conciertos, e incluso se reportó el derrumbe de un techo. Se estima que más de 100 personas quedaron atrapadas en Crocus City Hall durante el caos desatado por la violencia.

Testigos relatan que hombres armados, algunos de ellos barbudos, irrumpieron en el lugar y abrieron fuego con armas automáticas, generando pánico y confusión entre los presentes. Aunque no se descarta la posibilidad de un atentado terrorista, las autoridades prefieren ser cautelosas en sus declaraciones.

El grupo musical Picnic, que se encontraba ofreciendo un concierto en el momento del tiroteo, afortunadamente no resultó herido. La Embajada de Estados Unidos en Rusia había emitido una advertencia previa sobre posibles ataques en lugares concurridos de Moscú.

Las fuerzas de bomberos aguardan la llegada de fuerzas especiales para poder iniciar la extinción del incendio en el lugar. El gobernador de la región de Moscú, Vorobyov, y el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, se pronunciaron sobre la tragedia, expresando sus condolencias a los familiares de las víctimas. Los Equipos Especiales de Reacción Rápida de Rusia (SOBR) y las Unidades Especiales Móviles de la Policía de Moscú (OMON) fueron desplegados en la zona para hacer frente a la situación.