El "Negro" Rada apareció sobre el escenario con coloridos atuendos, una sentida alegría y acompañado por diez músicos que hicieron de la noche una verdadera fiesta.

Con su hijo, Matías Rada (actual Illya Kuryaki and the Valderramas) y Federico Navarro en guitarras, Nelson Cedrez en batería, Gerardo Alonso en bajo, Andrés Arnicho en teclados, Fernando "Lobo" Núñez en tambor piano, José Luis Martínez en tambor chico, Noé Núñez en tambor repique y su hija, Lucila Rada y Laura González en coros, Rada inauguró la velada con "Ayer te vi" y algunos fragmentos de "El día que me quieras" de Carlos Gardel.

Si hay otra cualidad del percusionista que deba ser destacada es sin dudas su humor, y con él supo conquistar a un público que -de todas formas- se había rendido ante uno de los mayores exponentes de candombe en Latinoamérica, en el preciso instante en que su figura se hizo palpable.

Los aplausos estuvieron presentes sin cansancio a lo largo del recital. Los coros y los juegos con la multitud generaron que no sólo el "Negro" festeje sus 30 años de amor con Argentina, sino también que lo disfrute y lo festeje el público.