En la misiva, fotógrafos, redactores de agencias de prensa y algunos programas de televisión se quejan de la “lamentable actitud” de la pareja conduciendo por el área urbana a “velocidades muy por encima de lo permitido, de no respetar los semáforos en rojo, de conducciones muy peligrosas haciendo zigzag, de estacionar los coches encima de la acera, de conducir en contra dirección, etcétera”, consigna hoy el diario El País de España en su edición on line.


En el escrito, en el que no consta cuántas personas lo suscriben, los profesionales critican la actitud de una policía local a la que aseguran que Piqué y Shakira usan “a su antojo” para parar a los fotógrafos “en los seguimientos que se les hace argumentando que podrían ser terroristas”.


El “entorno de seguridad de Shakira conoce perfectamente a todos los que trabajamos en esta ciudad y sus vehículos”, recuerdan.


Según los fotógrafos, esta situación se produce “desde hace meses” y dicen que temen que pueda degenerar males mayores, recordando el accidente de Lady Di, que murió junto a su pareja Dodi Al Fayed, al chocar el vehículo contra un pilar, cuando huían de varios fotógrafos a toda velocidad. Según la justicia, el accidente fue debido a la actitud negligente del conductor del Mercedes.


La gota que colmó el vaso, según publica la revista Vanity Fair, fue un incidente el pasado martes, cuando la a pareja salió a cenar junto a sus padres y sus hermanos a un restaurante de la ciudad catalana.


Los coches huyeron a 180 kilómetros por hora, según la versión que da uno de los paparazis a la revista, por la Ronda de Dalt, donde el límite permitido son 80.


A salir de la vía, encontraron a Piqué hablando con una pareja de guardias urbanos, que posteriormente paró a los fotógrafos.


Es por ello, que los profesionales recordaron en la carta que el artículo 20 del a Constitución española los habilita a tomar imágenes de personas públicas en lugares públicos.