Miles de personas firmaron hasta el momento un petitorio en la web de la Casa Blanca para deportar al cantante canadiense Justin Bieber, que había sido detenido en Florida por conducir en una carrera ilegal supuestamente bajo la influencia de sustancias tóxicas. “Nosotros, el pueblo de Estados Unidos, sentimos que no estamos bien representados en el mundo de la cultura pop. Nos gustaría ver al peligroso, insensato, destructivo y consumidor de drogas Justin Bieber deportado y con su permiso de residencia revocado”, dice la petición, colgada por un grupo de reaccionarios en la sección We The People de la página oficial de la Casa Blanca.

Para ellos no sólo es “una amenaza para la seguridad” sino que también es “una mala influencia” para los jóvenes. “Nosotros, el pueblo, queremos que Justin Bieber salga de nuestra sociedad”, añade el texto creado por un ciudadano de Detroit. Si el próximo 22 de febrero la petición sobre Bieber alcanza las 100.000 firmas, el Gobierno tendrá la obligación de pronunciarse al respecto. Bieber reside en EE.UU. con una visa O-1, que se concede a aquellas personas que tienen “una excelente habilidad en las ciencias, las artes, la educación, los negocios o el deporte”.

Un extranjero con residencia permanente (Green Card) o visa temporal, como es el caso de Bieber, puede ser deportado de EE.UU. si se le declara culpable de un delito con agravante, como un robo, aunque los relacionados con la posesión de drogas pueden suponer también la expulsión. El ídolo teen está desde hace varios meses saltando de escándalo en escándalo. El último y más importante de sus conflictos sucedió la semana pasada cuando fue detenido por conducir una picada con un lujoso auto presumiblemente bajo los efectos del alcohol y las drogas.

Según un informe policial, Bieber y un amigo conducían un Lamborghini amarillo y un Ferrari rojo, respectivamente, y competían en una “carrera de aceleración” en una zona céntrica residencial de Miami Beach. Al parecer, amigos del cantante cerraron una de las calles con otros vehículos para que Justin y Amir pudieran competir, pero los residentes en la avenida Trine Pine Drive alertaron a la policía.

Los tres cargos que se le imputaron son: conducción bajo la influencia de sustancias tóxicas, alcohol y marihuana (DIU, como se conoce en los Estados Unidos), resistencia a la autoridad sin violencia y conducción con un carné que había expirado. Bieber admitió a la Policía que había fumado marihuana, bebido unas cervezas e ingerido unas pastilla antes de ser detenido por supuestamente participar en una “carrera de aceleración”.