Es ley el 82 por ciento móvil para las jubilaciones mínimas y la actualización de todas las categorías del sector pasivo según los fallos de la Corte Suprema.

Con el voto decisivo de Julio Cobos, el Senado aprobó el proyecto luego de un empate en treinta y cinco sufragios entre la oposición que lo impulsaba y el oficialismo que lo rechazaba, pero que dio quórum.

Pese a los varios artículos que transforman el sistema de reparto solidario en un sistema de capitalización de facto, el vicepresidente, argumentó que su voto era “en apoyo de la equidad social” y que la decisión se sustentó “en largas discusiones”.

El último orador fue el jefe del bloque kirchnerista, Miguel Ángel Pichetto, quien le dijo a Cobos, con frágil lógica, que “el vicepresidente debe estar al lado del presidente, porque han sido elegidos por la misma fórmula”.

El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, ratificó que la ley será vetada porque el Gobierno “no está dispuesto a permitir que el Estado y la Argentina se suiciden”.

El aumento de las jubilaciones al 82 móvil del salario mínimo, vital y móvil supone una suba de los actuales 1.046 pesos a 1.427 este mes y a 1.508 desde enero, pero beneficia sobre todo a los grandes aportantes, con un altísimo costo monetario.

Es la primera ley que logró imponer la oposición al kirchnerismo desde que cambió la composición del Parlamento.

Miles de personas de organizaciones sindicales, políticas y sociales se concentraron frente al Congreso para apoyar la sanción de la ley.