Los ministros de Economía y representantes de los Bancos Centrales del G-20 coincidieron en la necesidad de mantener los estímulos fiscales en el marco de la crisis externa y que se debe avanzar en la regulación del sistema financiero y las reformas de los organismos multilaterales.

Así lo señaló a la prensa el jefe del Palacio de Hacienda, Amado Boudou, desde Corea del Sur.

"Se ha visto que hay que mantener los estímulos fiscales, no es momento para retirarlos pese a que es cierto que el bloque pone énfasis en la necesidad de diseñar a futuro salidas para estas medidas", explicó Boudou.

En el mismo sentido, el ministro indicó que, "por otro lado, un dato importante tiene que ver con la necesidad de una mayor regulación en el sistema financiero" y una "reforma en los organismos multilaterales".

"Las calificadoras tuvieron gran importancia en el desarrollo de los mercados financieros" y han sido "una mala guía para la asignación de recursos", advirtió.

Según Boudou esto "generó malas decisiones que se han potenciado", las que relacionó con las "principales causas de la crisis como la de las hipotecas subprimes".

"Las calificadoras se guían más por cuestiones ideológicas que de fundamentación económica", y derivan en "malas decisiones de inversión, lo que es grave para los inversores pero también desde el punto de vista sistémico", sostuvo el ministro.

Asimismo, aseguró que esto se agrava en "una economía globalizada", donde las hipotecas subprime "terminaron teniendo consecuencias en la economía real".

"Por eso esperamos que en la reunión de líderes de Toronto (Canadá) podamos tener resultados concretos para la regulación del sistema financiero y también en el tema de las calificadoras", pidió.

Boudou relató que en el encuentro también estuvo presente "el tema de las reformas de los organismos multilaterales de crédito. Esperamos que se pueda avanzar en lo que hace al esquema de toma de decisiones", reclamó el titular del Palacio de Hacienda.

Al respecto, señaló que se está "viendo que las recetas que se llevan adelante en países como Grecia serán causa de problemas más graves".

Por tal motivo recomendó ver la situación "no como una foto sino analizarlo como una película".

Según Boudou, los organismos "proponen grandes desajustes fiscales que se convierten en un sistema que luego erosiona la capacidad de repago de los países y profundiza la crisis", además de "agravar en el mediano plazo el problema".