El partido fue malo. Racing no consiguió protagonizar las acciones casi en ningún momento del encuentro y Gimnasia se terminó llevando lo que fue a buscar, aunque lo hizo sin mezquidad, pero con limitaciones.

En el equipo de Fernando "Pintita" Gago, hubo debuts, de los que generan expectativa, como Edwin Cardona, el colombiano que vino de Boca por alrededor de 3 millones de dólares y el "demonio" Hauche que costó cerca de un millón de la moneda norteamericana.

Ni siquiera empezaron a pagar los primeros céntimos de esas cifras. Aportaron poco y nadie, se perdieron en la confusión general y el clima en el Cilindro se fue enrareciendo.

Lo mas peligroso fue un penal para Racing que ejecutó el insultado Correa y detuvo Rodrigo (no Patricio) Rey, sin demasiada dificultad, anunciado, débil.

En el segundo tiempo el que tuvo un "casi penal" fue Gimnasia, que salió de contra, Carbonero le gano a todos y quedó mano a mano con el arquero Gómez, quiso por arriba y el guardamenta de Racing llegó con la punta de los dedos.

Cero a cero que es totalmente justo, dos equipos bastante pobres, aunque uno de ellos, el local, que aspiraba a mucho más.