“Se la voy a seguir a Grondona a muerte, aunque me ponga algún boludo que salga a hablar como salió Perico Pérez o Juanjo Borrelli. Yo no hablé de ellos, porque no estaba mirando quién tomaba o quién no el café veloz. Me importaba estar unido y concentrado para el partido, porque nos jugábamos demasiado. Me gustaría enfrentarlos cara a cara”, dijo el Diez en declaraciones radiales.



En broma, aunque luego fue subiendo el tono, Maradona contó que “hubo varios que no pudieron dormir, no sé porqué” y que él sabe quien tomó y quién no pero que se los dirá “en la cara”. “Redondo no necesitaba absolutamente nada. Y había otros que le ofrecíamos café”, relató.




“Si al jugador el médico le dice que coma mierda para jugar, la come. Que no te quepa la menor duda. Lo que quiere es salir a la cancha. Pero creo que nos hubiera ido bien igual sin el café veloz. Ahora lo que me jode es si Perico Pérez dijo que tomó agua. Porque si él tomó agua, entonces yo tomé café con leche. Si sale a hablar que me llamé primero a mí, porque tenemos una relación muy buena. Borrelli no jugó, ¿para qué va a tomar un café veloz, para ir a la casa?”, lanzó hacia dos de los ex jugadores de aquel plantel que salieron a hablar sobre el tema.




Las drogas en el fútbol es un tema tabú, pero no para Maradona. “Esto no viene de ahora, Grondona, y el fútbol argentino, impuso el control antidoping porque se jugaban las Copas Libertadores y decían que los jugadores no podían cerrar los ojos. Grondona sabía y la sabíamos todos los que habíamos jugado en el futbol argentino. Argentina no podía quedar afuera de un mundial con Australia. Pero esto no empaña lo del 94, cuando me maté, bajé de 90 kilos a 74, me levantaba a correr y hacía doble entrenamiento”, recalcó. Y criticó al Coco Basile, quien dijo que lo del “café veloz” era “una pelotudez”. “Será una pelotudez pero porque él está bien con Grondona y yo no. Basile viene de una época en la que no había antidoping, como Bilardo. No es una pelotudez si vamos a hablar de la droga en el fútbol”, agregó.




“Si me apurás un poquito te digo que fui yo solo pero en la intimidad con el que quiera discutir conmigo saben dónde vivo. Pero que no boludeen por los diarios porque están entrando en el juego de Grondona. Nosotros los jugadores de fútbol estamos haciéndole un apriete a Grondona para que mejore el fútbol y ahora resulta que se ofenden por algo que es verdad”, explicó el Diez. “Me encantaría no hablar de estas giladas, porque me podrían haber llamado por teléfono. Hoy te cruzás con un montón de jugadores con los que jugaste y no los conocés. Cuando ven que pueden salir en televisión, responden cualquier verdura y eso me da bronca. Estoy sorprendido. Cuando tengan el culo sucio seguramente vamos a hablar pero yo tengo la suficiente tranquilidad como para decirles quiénes fueron junto conmigo. Pero se los voy a decir en la cara”, cerró.