Las últimas horas de la delegación argentina en Brasil se desarrollaron en el hotel Radisson, ubicado frente a las playas de Barra da Tijuca.

Ahí, los futbolistas recibieron la visita de los familiares, quienes intentaron modificar el ánimo del grupo, que llegó abatido del Maracaná tras la derrota con Alemania.


La aventura que empezó el 9 de junio pasado, con el viaje a Belo Horizonte para instalarse en el predio Cidade do Galo, el búnker criollo elegido para la Copa del Mundo, llegó a su última estación hoy.


A las 6.30, en un vuelo chárter, partieron desde el aeropuerto Santos Dumont, de Río de Janeiro, los subcampeones. El horario estipulado de arribo al aeropuerto de Ezeiza del grupo sería alrededor de las 10.