Lanús fue eliminado de la Copa Libertadores 2012, al caer como local en la definición por penales con Vasco da Gama, de Brasil, por 5 a 4, luego de haber ganado 2 a 1 en los 90 minutos. Nilton anotó para el visitante, igualó Mariano Pavone y desniveló Teófilo Gutiérrez.

El conjunto Granate cayó desde el punto del penal porque el cordobés Silvio Romero estrelló su remate en el travesaño. Los brasileños se habían impuesto por 2-1 en el encuentro de ida jugado la semana pasada.

La noche había arrancado muy bien para el conjunto carioca, a punto tal que Nilton Ferreira, uno de los mejores valores del visitante a lo largo del partido, abrió la cuenta a los 18m. de la primera mitad, con un remate desde larga distancia. En ese segmento de arranque, Vasco lució más metido y despierto. Dominó el desarrollo, aprovechando el nerviosismo de un conjunto `granate` que tuvo un enemigo inesperado: confundió velocidad con vértigo e hizo todo mal.

Inclusive, la diferencia en favor de los brasileños en los 45m. iniciales pareció corta, ya que si hubiesen gozado de una mayor profundidad, tal vez, la pizarra se hubiera ampliado.

Pero en el segundo tiempo, el equipo de Schurrer reaccionó, dio vuelta el marcador y llevó el desenlace a la definición por tiros desde el punto del penal. Y el ingreso del refuerzo "estrella", el delantero Teófilo Gutiérrez, fue clave para ese mejor desempeño del local. Porque el colombiano, ex Racing, se asoció con criterio con Mauro Camoranesi y entre ambos, más la movilidad de Mario Regueiro, le permitieron a Lanús pasar de dominado a dominador.

A los 15m., entonces, el equipo Granate sacudió la red, a través de un disparo de Mariano Pavone, quien aprovechó un pase en profundidad y definió, luego de una maniobra que bien pudo haber sido invalidada por el árbitro paraguayo Carlos Amarilla, ya que empezó con un foul de Regueiro a un defensor visitante en el área.

Entonado por su público y por el empate logrado, el conjunto local se fue decididamente hacia la valla de Fernando Prass y tuvo su premio, a los 32m., cuando Gutiérrez gritó su primer gol en la institución sureña. Teo empujó a la red una pelota, luego de que el arquero rival diera un rebote demasiado largo ante un disparo del zurdo Maximiliano Velázquez.

De allí hasta el final, Lanús tuvo alguna que otra chance para desnivelar y quedarse con la clasificación, como en un cabezazo de Pavone que el arquero brasileño mandó al córner.

Pero la definición se dio a través de los penales. Y allí Vasco mostró eficacia del 100 por ciento para hacer festejar a un puñadito de hinchas, que ya palpitan el cruce ante Corinthians.

Para Lanús quedó la sensación de amargura por la eliminación, pero no hubo reproches desde las tribunas. Porque el equipo de Schurrer reaccionó, se sobrepuso a un flojo primer tiempo y terminó ganando, en los 90 minutos, con absoluta justicia.