Francia es un gran equipo, pero humano y por ende falible. Salvo, cuando la tiene Kylian Mbappé. El delantero del Paris Saint-Germain brindó un recital y gracias a una asistencia y dos golazos suyos, su seleccionado derrotó 3 a 1 a Polonia. Robert Lewandowski descontó de penal cuando el partido estaba por terminar.