En el debut de Sebastián Battaglia como entrenador, Boca rompió una muy mala racha y consiguió una valiosa victoria contra Patronato en la Bombonera, por 1 a 0 con gol del juvenil Luis Vázquez.

En el primer tiempo fue Patronato quien manejó el partido, de hecho parecía que Miguel Russo seguía sentado en el banco de los de la Ribera. El único jugador que hacía cierta diferencia era Cristina Pavón.

Al punto que, alrededor de los 20 minutos vino un centro de la izquierda al área de Boca, el arquero Rossi quiso salir, se chocó con su compañero Advíncula, un jugador de Patronato la empujo al gol y el réferi resolvió la cosas cobrando una supuesta falta en ataque contra el inseguro Rossi.

Por suerte para Boca el primer tiempo terminó y en el segundo la cosa mejoró bastante, aunque siempre sin llevar peligro al arco del Patrón.

Hasta que Battaglia metió dos cambios: Aaron Molinas y Exequiel Zeballos, enganche y delantero de la reserva. Pase profundo de Molinas, Zeballos recibe por la izquierda, hace una par de bicicletas que desorientan al defensor que lo enfrentaba y le sirve a Vázquez un centro a la cabeza para el 1 a 0.

Tres pibes de la reserva llevaron a un Boca que no cambio demasiado, más allá de la valentía del técnico de poner a tiempo a los juveniles lo que le alcanzó para romper la racha que implicó el peor inicio de campeonato desde 1957.