El Xeneize había arrancado su participación con la ilusión de siempre, aunque en su presentación sufrió un duro revés al caer sorpresivamente ante el Toluca de México en La Bombonera, por lo que necesitaba sí o sí traerse aunque sea un punto de su excursión a Guayaquil.

En este contexto, el primer tiempo tuvo un trámite para el olvido. Ninguno de los dos equipos supo ni quiso ponerse el traje de protagonista, y así se prestaron el balón y las imprecisiones fueron moneda corriente durante la mayor parte de la etapa.

Boca, que presentó a Lucas Viatri por Santiago Silva (que ni viajó) por decisión de Bianchi, no gravitaba porque sus delanteros casi no entraban en contacto en balón, y mucho tuvo que ver en eso la floja labor del mediocampo xeneize.

Pero del otro lado, Barcelona tampoco se sentía cómodo con el encuentro y no se terminaba de decidir a atacar, quizás por respetar demasiado a su rival. Pese a esto y, con poco, fue algo más que Boca en esos primeros 45 minutos.

Incluso, el local llegó a vulnerar el arco defendido por Agustín Orion, aunque el referí anuló el tanto de Michael Arroyo por una clara mano del delantero ecuatoriano. Antes, Bryan De La Torre, con un remate alto, otra vez Arroyo, con un tiro libre que se fue cerca, habían inquietado la valla visitante.

Sin embargo, pese a esa mediocridad, Boca iba a tener la situación más clara de todo el primer tiempo, cuando Juan Manuel Martínez aprovechó una desatención defensiva y quedó mano a mano con el arquero, pero definió cruzado y desviado.

Pero ya en el complemento, el Xeneize iba a encontrar el camino mediante uno de sus puntos más fuertes: la pelota parada. Cuando poco pasaba en ese segundo tiempo, de un tiro de esquina nació el primer tanto, que fue convertido por el Burrito Martínez que sólo tuvo que definir dentro del área chica.

Pocos minutos más tarde, otro centro, esta vez desde la izquierda y por intermedio de Nicolás Colazo, encontró un gran cabezazo del Chiqui Pérez, que saltó más alto que todos y puso un 2 a 0 que iba a terminar siendo definitivo gracias a la poca respuesta del Barcelona tras esos dos golpes.

Sobre la hora, y cuando ya no había nada por hacer, Clemente Rodríguez cometió un infantil penal y Arroyo lo cambió por gol sólo para decorar un resultado que ya estaba sentenciado.

Así, con poco (quizás muy poco), a Boca le fue suficiente para justificar un triunfo merecido y sumar su primera alegría en el certamen. Seguramente Bianchi tendrá que trabajar y mucho porque su equipo sigue sin demostrar el nivel esperado, aunque estos tres puntos pueden significar un envión anímico que Boca, sin duda alguna, necesita como agua.

-Síntesis-

Barcelona: Máximo Banguera; Pablo Saucedo, Frickson Erazo, Víctor Valarezo; Juan Carlos Paredes, Matías Oyola, Nicolás Olmedo, Brayan de la Torre, Michael Arroyo, Damián Díaz; Ariel Nahuelpan. Director técnico: Gustavo Costas.

Boca: Agustín Orion; Emiliano Albín, Claudio Pérez, Guillermo Burdisso, Clemente Rodríguez; Pablo Ledesma, Ribair Rodríguez, Cristian Erbes, Nicolás Colazo; Juan Manuel Martínez y Lucas Viatri. Director técnico: Carlos Bianchi.

Goles: en el segundo tiempo, a los 13 minutos, Martínez(BJ); a los 17, Pérez(BJ); a los 47, Arroyo(B), de penal.

Cambios: en el segundo tiempo, a los 20 minutos, José Manuel Ayoví por Valarezo(B); a los 36, Holger Matamoros por Olmedo(B); a los 38, Walter Erviti por Colazo(BJ); a los 41, Diego Rivero por Martínez(BJ); a los 48, Leandro Somoza por Erbes(BJ).

Arbitro: Leandro Vuaden (Brasil).

Estadio: Monumental (Guayaquil, Ecuador).