Este domingo se terminarán varios misterios y se despejarán muchas incógnitas respecto de quien podrá gobernar durante los próximos diez años en nuestro país.

Este domingo es otro de esos días maravillosos e igualitarios porque cada argentino vale un voto y se produce la ceremonia más colectiva de la democracia. Todo el pueblo argentino, va a elegir a 127 de sus representantes para la Cámara de Diputados y 8 provincias, entre ellas la Capital Federal, van a elegir 3 senadores nacionales cada una.

Este domingo vamos a poder expresarnos con toda libertad y eso, siempre es un momento de felicidad ciudadana. Cuando se abran las urnas aparecerán las respuestas a cientos de preguntas que en forma colectiva daremos los 30.530.323 compatriotas que estamos en condiciones de votar. Hay novedades interesantes: las mesas mixtas, los boca de urna a través de twitter, los troqueles o recibos del voto en lugar de la firma en la libreta y el voto de 592 mil pibes de 16 y 17 años que podrán votar en forma optativa por primera vez. Pero las grandes noticias, hay que buscarlas en los resultados. El gobierno nacional dirá que mantiene su condición de primera fuerza electoral y estará en lo cierto.

El Frente para la Victoria será la agrupación más votada sumando los votos de todo el país. Eso es seguro. La gran pregunta es si el porcentaje de votos será tan exitoso como en el 2011 en el que llegó al 54% o tan crítico como en el 2009 cuando logró merodear el 30% de los votos. Por la manera en que se renueva el Congreso, contra aquella elección parlamentaria es muy probable que el cristinismo aumente su cantidad de diputados. Podrá sumar entre 5 y 10 legisladores más. Eso será presentado como otro gran logro.
En la Cámara Alta la cosa cambia. Si en octubre el oficialismo ocupa el tercer puesto en la Ciudad de Buenos Aires podría perder los dos senadores y quedarse sin mayoría.

Por su parte la oposición, que dice representar a más del 60% de los argentinos que están hartos de este gobierno, podrá exhibir también sus triunfos relativos. Es muy probable, por ejemplo, que el kirchnerismo llegue tercero en la Capital como le dije, o en Córdoba o en Santa Fe o en un distrito emblemático como Santa Cruz que fue la cuna del proyecto K. El Frente para la Victoria puede ser derrotado también en Mendoza y la gran incógnita, la pregunta del millón es que pasará en la provincia de Buenos Aires.

Si gana Sergio Massa como algunas encuestas lo indican nacerá una nueva estrella dentro del peronismo no kirchnerista que se sumará a las de De la Sota en Córdoba con la idea de construir una alternativa de poder para el 2015 y vencer al kirchnerismo. Si gana Martín Insaurralde, se consolidará el proyecto de Cristina y se abrirán las puertas para una reforma constitucional que permita una nueva reelección. El resto de los precandidatos a presidente deben ganar en su distrito y algunos van a ganar con cierta comodidad, según dicen las consultoras. Hermes Binner ratificará su liderazgo en la centroizquierda.

Al parecer superará los 40 puntos y dejará al kirchnerismo de Jorge Obeid y al macrismo de Miguel Del Sel peleando por el segundo lugar. Mauricio Macri también ganará con holgura su distrito tal como lo vimos el miércoles y respecto de probables presidenciales no hay mucho mas. Se podría sumar a un gobernador como Daniel Scioli, Sergio Uribarri o Jorge Capitanich si el kirchnerismo gana en Buenos Aires, Entre Rios o Chaco siempre y cuando la actual presidenta decida elegir un delfín y abandonar las intenciones de darle el gusto a Diana Conti para tratar de ser eterna o a Juan Cabandié y quedarse 50 años mas.

Este domingo seguiremos construyendo nuestro destino como Nación. Como siempre le digo, en estos comicios usted con su voto puede darle un buen empujoncito al candidato que prefiera o ponerle un freno al que no le guste. Paso a paso vamos armando el rompecabezas electoral que se consolidará el 27 de octubre. Este domingo que viene es la hora de la verdad. De usted depende.