Tras lanzarse como candidato a diputado nacional para renovar su banca, Felipe Solá consideró a Sergio Massa como el hombre oculto que sucederá como candidato presidencial a Cristina Kirchner.

"Es un tapado que cuando se defina en 2013 puede cambiar la escena política, incluso la del 2015", analizó el ex gobernador bonaerense.

Además, Solá consideró que Daniel Scioli "no es un personaje" para los comicios de octubre. Y acusó al gobierno nacional de dejar "solas a las provincias que no tienen un mango, en especial la de Buenos Aires".

El actual diputado también criticó al oficialismo por el funcionamiento que le impregna al Congreso y cargó contra las sesiones "maratónicas" que terminan durante la madrugada.

"Me cae como el culo cuando dicen que el Parlamento es una escribanía. No hay debate, cada uno dice su discurso y nadie se oye. Las sesiones son una prueba de destreza física, esas maratones que terminan en la madrugada no sirven para nada sino para cansarlos", señaló hoy el legislador.

En su diagnóstico político, Solá desestimó la idea de que el Gobierno impulse una reforma de la Constitución porque "en Diputados harían falta 171 diputados pero hoy el Gobierno llega a 129" aunque "si en las elecciones el Gobierno gana por poco o pierde como en 2009 van a dejar un Parlamento muy parecido".

Por otra parte, Solá se posicionó en referencia a cuestiones de la agenda económica. En relación a los proyectos de blanqueo de dólares impulsados desde el Ejecutivo, el ex gobernador de Buenos Aires opinó que "no va a cambiar absolutamente nada respecto al estado de la gente a la ansiedad y la incertidumbre con el dólar y la economía".

"Estamos juzgando el pasado. Ahora sale al descubierto esto cuando está liquidado. Sirve para la conciencias de las personas", manifestó en declaraciones radiales.

El diputado también le dedicó unos dardos al canciller Héctor Timerman, a quien acusó de trabajar "en secreto con dos funcionarios iraníes" a espaldas de la Presidente para cerrar el memorándum de entendimiento, acuerdo que "se anunció como la panacea y es sólo el ejercicio de distracción".

"Estuvo pensando en hacer el gol del año, pero como no pudo doblar nada, entonces le trajo un papelito en el que importa un artículo. Eso no tiene un carajo que ver con la indagatoria sino que el juez elige la hora, el lugar, cuánto dura, quién está presente y quién no", argumentó.

Además, consideró que Timerman es de los ministros "que sólo trabajan para quedar bien con la Presidente" y en caso de ser funcionario de otro país lo hubieran echado. "Se da el lujo de presentar las cosas de manera agresiva y lo lleva a acceder a un estadio superior. Lo usaron, hizo un papel muy feo", concluyó.