Un reciente informe elaborado por el Observatorio de la Deuda Social de la UCA (Universidad Católica Argentina) proporciona datos sobre la pobreza en Argentina, que es uno de los indicadores más preocupantes de la situación económica actual.

Según el informe, el índice de pobreza en Argentina afecta al 38,9% de la población, una tasa similar a la observada en 2006, hace 17 años. Además, se observa una tendencia preocupante, ya que la tasa de pobreza es más alta en el grupo de edad de 0 a 17 años, alcanzando el 61,6%. Esto indica que existe un alto nivel de pobreza que se mantendrá en los próximos años.

El estudio también señala que a partir de 2013, la tasa de pobreza ha aumentado a medida que el gasto social del gobierno en relación al PBI ha aumentado. Esto significa que, a pesar de la expansión del gasto público para atender las necesidades de las personas, cada vez más personas se quedan sin acceso a bienes y servicios básicos.

En 2013, el 25,3% de la población se encontraba por debajo del umbral de pobreza, y el gasto social representaba el 12,5% del PBI. Una década después, con un gasto social que ha aumentado al 17% del PBI, casi el 40% de la población se encuentra en situación de pobreza.

En cuanto a la tasa de indigencia, que se refiere a los ingresos insuficientes para cubrir una canasta básica de alimentos, se estima que alcanzará el 19,6% de la población si no se tienen en cuenta las contribuciones como la Asignación Universal por Hijo (AUH), otros programas y las pensiones no contributivas. De manera similar, la pobreza se estima que aumentará al 50% sin estas contribuciones.

Informes privados sugieren que la pobreza en Argentina actualmente supera el 40% de la población debido a la desaceleración de la actividad económica y una inflación que supera el 100% anual. Esta dinámica podría llevar al índice de pobreza a niveles similares a los de 2004. Esto significa que actualmente hay alrededor de 12,5 millones de argentinos que viven en situación de pobreza.

Se espera que el próximo informe del INDEC, que se publicará el 27 de septiembre con datos al cierre del primer semestre de este año, muestre un aumento exponencial en el número de pobres debido a la creciente inflación y la devaluación del peso argentino.

En los últimos seis meses de 2022, el INDEC informó que la pobreza fue del 39,2% y la indigencia del 8,1%. Esto significa que de los 9.908.229 hogares en 31 aglomerados urbanos, 2.928.152 hogares se encuentran por debajo de la línea de la pobreza, lo que incluye a 11.465.599 personas. Además, 614.043 hogares se encuentran por debajo de la línea de la indigencia, lo que corresponde a 2.356.435 personas indigentes.