Todo terminó en una enorme fiesta en el Nuevo Gasómetro. Los hinchas extasiados con el primer triunfo como local del equipo en la Copa de la Liga y con la clasificación asegurada para la Copa Libertadores 2024 por haber sido uno de los cuatro mejores equipos en la tabla anual. Los jugadores, emocionados por las despedidas de algunos integrantes del plantel y convencidos de haber dado todo lo posible por devolverles la alegría a quienes coparon las tribunas una vez más en el Bajo Flores. 

Un rato antes, en el partido, San Lorenzo fue el que se impuso con carácter y hasta con juego, algo que no le sobró en todo el año, más allá de que le alcanzó para cumplir con el objetivo de volver a disputar la Libertadores. Es cierto que Insúa se había impuesto el objetivo de ganar un título en 2023 y que no le alcanzó, pero también es verdad que el equipo rindió mucho más de lo previsto. No brilló, es cierto. Pero sumó puntos y eso es lo que vale al final del camino. Y si no, que lo diga Boca, que todavía mantenía la ilusión de clasificarse para la Libertadores. 

En los 90 minutos que se jugaron en el Nuevo Gasómetro, San Lorenzo fue más que Central Córdoba y fue un justo ganador. Un golazo de Jalil Elías (en su último partido con la camiseta del Ciclón) y un cabezazo de Gastón Hernández (un defensor que está destinado a dejarle unos buenos billetes a la tesorería del club) aseguraron el 2-0 final y la fiesta en el Bajo Flores.