Una adolescente de 14 años fue secuestrada y violada en el barrio Tablada de Rosario. La joven, identificada como Alma, fue privada de su libertad la noche del miércoles. Alrededor de las 22, salió de la iglesia y no regresó a su casa.

Aparentemente mientras caminaba por la calle un hombre le pidió que lo ayudara a levantar una escalera pesada que estaba dentro de su casa. "Cuando se asomó, la golpeó en la cabeza, la tiró al piso para atarla y le pegó", explicó su hermana. 

La misma secuestrada generó el rescate. En un momento pudo hacerse del celular de su captor, entonces, llamó al 911, y dejó el teléfono encendido para que se escuche la conversación. "Al violador se le cayó el celular, ella lo agarró y lo escondió. A la una de la madrugada, ella llamó a la Policía para que escuchara lo que estaba pasando. Se escuchaba como él la amenazaba", contó una vecina a medios locales.

La Justicia ordenó rastrear la llamada y la policía fue hasta a la cuadra de donde provenía la señal. Al notar la presencia de los policías, el hombre le exigió que se pusiera un vestido y que se hiciera pasar por su hermana, porque si no, la mataría "con un cuchillo en la garganta". Sin embargo, cuando el abusador fue a abrirle la puerta a los efectivos, ella pudo sacar la mano por una de las ventanas y gritar. Entonces, los agentes actuaron de inmediato y la rescataron.