La línea B del subte reanudó esta mañana el servicio, en cumplimiento al compromiso asumido por los metrodelegados quienes, no obstante, ratificaron que podría haber nuevas "demoras e interrupciones" hasta la "puesta a punto" de las nuevas estaciones Echeverría y Juan Manuel de Rosas. El secretario general de la AGTSyP, Roberto Pianelli, aseguró hoy que "problemas técnicos va a seguir habiendo".

"Se ha firmado un acta entre la empresa (Metrovías) y los trabajadores en la que se dice que para poder poner a punto las estaciones, inevitablemente, surgen problemas técnicos, sobre los cuales los trabajadores no tienen nada que ver", sostuvo el sindicalista. También confirmó que en el documento firmado ayer, Metrovías, que había denunciado días atrás "sabotajes", reconoció que los trabajadores de subte "no son responsables" por los problemas que se generaron en la línea B y que derivaron en incidentes con los usuarios.

Ayer, el sindicalista se había expresado en el mismo sentido al señalar que si bien el servicio iba a ser retomado -lo que ocurrió hoy a las 5.30- "la gente tiene que estar atenta porque pueden producirse interrupciones y demoras a raíz de la puesta a punto de las estaciones". Subterráneos de Buenos Aires (SBASE), por su parte, sostuvo en un comunicado que "las partes reconocieron que las estaciones están en perfectas condiciones de seguridad para operar con normalidad, como lo han demostrado las inspecciones de distintos organismos".

Esta mañana, Pianelli indicó que le "gustaría que SBASE ahora diga que las barbaridades que dijo sobre que la culpa" de los inconvenientes del servicio de la línea B "era de los metrodelegados, diga que fueron mentira. Si en las dos nuevas estaciones se hubieran hecho las pruebas antes de inaugurarlas, los problemas se hubieran detectado antes", insistió en advertir el dirigente gremial.

Al volver a apuntar contra el gobierno porteño de Mauricio Macri, reiteró que las estaciones "se inauguraron a las apuradas debido a las necesidades electorales del gobierno de la Ciudad".

Por otra parte, Pianelli rechazó versiones surgidas desde algunos sectores acerca de que los sindicalistas estarían buscando quedarse con la concesión del subte. "Nadie se quiere quedar con ningún negocio", replicó y remarcó que "en ningún momento planteamos que queremos el subte para manejarlo nosotros; los trabajadores estamos orgullosos de vivir de un salario y de hacer respetar nuestros derechos y las condiciones laborales".

Asimismo, aseguró que los inconvenientes del servicio de la línea B en los últimos días no fueron producto de "huelgas" decididas por los metrodelegados. "No hubo huelgas durante esta semana, hubo problemas técnicos porque si hay un tren que se rompe y no puede avanzar, los otros tampoco", argumentó.