La Comisión Nacional de Derechos Humanos alertó que chicas jóvenes al norte de la India, en el estado de Rajasthan, estaban siendo vendidas para pagar las deudas que sus padres no pueden costearse. 

Las personas que viven en zonas rurales en India, usualmente piden dinero de sus vecinos para poder costear los costosos tratamientos médicos de sus familiares. Según medios locales, es común que en más de la mitad de los distritos cerca de Bhilwara, si una famila no puede pagar su deuda, el prestamista puede quejarse con los “panchayats de casta” o consejos de casta. 

Sin embargo, estos consejeros a manera de “acuerdo”, le ordenan a la familia a dar una de sus hijas, a veces incluso más de una dependiendo del tamaño de la deuda, para que el acreedor pueda venderla a un traficante y recuperar su dinero. En el caso de que la familia se niegue a vender a su hija, "sus madres pueden ser violadas bajo los dictados de los panchayats de casta para la resolución de disputas”.

Entre los casos más impactantes narrados por la Comisión, está el de un hombre que pidió prestado 1,5 millones de rupias (£15,800) de un vecino. Luego fue obligado por el panchayat a vender a su hermana y a su hija de 12 años para poder pagar la deuda. 

De igual manera, otro hombre que pidió prestado 600,000 de rupias (£6,300) cuando su esposa enfermó, los panchayat lo obligaron a dar a su hija al acreedor, quien después la vendió a un traficante en Agra. Desde ahí, “fue vendida tres veces, y ha estado embarazada en 4 ocasiones”, declaró la Comisión.

Kavita Srivastava, una veterana activista por los derechos de la mujer en Jaipur, Rajasthan, informó que era bien sabido que los panchayats de casta regulaban informalmente los asuntos personales de los aldeanos, como el matrimonio, la herencia o la custodia. Si las personas desafían sus órdenes, son condenadas al ostracismo y rechazadas por el resto de la comunidad.