Sergio Massa, presidente de la Cámara de Diputados de la Nación y porción sustancial de la coalición que llevó al poder a Alberto Fernández, fue a los Estados Unidos a buscar apoyos para la renegociación de la deuda externa. No le estaba yendo nada mal, hasta que algunas declaraciones desde el gobierno, y especialmente la posición que tomó el país en la OEA respecto a los presos políticos en Nicaragua, le detonó todo su trabajo.