El precandidato a jefe de Gobierno porteño por el Frente para la Victoria (FpV), Mariano Recalde, dijo hoy que "si pudimos revertir la realidad del país, podemos hacerlo en la Ciudad", rumbo a las elecciones primarias porteñas que se realizarán el próximo 26 de abril.

Recalde comparó con su gestión en Aerolíneas Argentinas donde "pasaron 37 años sin que ninguna gestión tuviera la vocación de encargar un avión de este tamaño, de estas condiciones", en referencia a la unidad presentada esta semana.

Relató que "encargamos 4, este es el primero que llega" y que en la actualidad la línea aérea de bandera cuenta con "70 aviones nuevos".

El titular de Aerolíneas afirmó que en las elecciones porteñas "la gente elegirá dos modelos de gestión, dos modelos de país que están en disputa y se ve en el transporte, donde mientras a nivel nacional cada vez viaja más gente en tren, con tarifas bajas, los subtes en cambio son cada vez más viejos y más caros, todo con tal de que a (Mauricio) Macri los números les cierren, dejando afuera un 20 por ciento menos de pasajeros en relación con los que viajaban antes de que subieran la tarifa".

En tanto, en otro medio, Recalde agregó que se trata de "un desafío hermoso" competir en la Ciudad, sobre todo para los que tienen "vocación política" y consideró que "ningún político, ni partido, tiene comprado los votos en ningún distrito, ya que los electores deciden con total libertad lo que más les conviene".

Recalde dijo que, a diferencia de lo que sucede hoy en la Ciudad trabajará "muchas horas por día y con todo el equipo fuertemente, no como nos mal acostumbró este gobierno, con sus funcionarios siempre de vacaciones".

"Hay muchos ejemplos de poca preocupación por la gestión, mucho tiempo de campaña, de vacaciones, de ver cómo se utilizan los recursos de la ciudad para hacer campaña nacional promoviendo una candidatura presidencial", destacó.

Por eso, Recalde se pronunció por un "cambio de concepción, por un Estado que piense en incluir a todos, en mejorar los barrios más postergados" más allá de que a algunos "no les guste que el Estado tome acciones estratégicas, intervenga en la economía, y quieran seguir votando opciones de derecha".