En Londres, los informes económicos atraviesan el Gobierno de Liz Truss, que a menos de dos meses echó a su jefe de finanzas, Kwasi Kwarteng causando más agitación en el Reino Unido.

“Cuando me pidió que fuera su ministro de Finanzas, lo hice con pleno conocimiento de que la situación a la que nos enfrentábamos era increíblemente difícil, con el aumento de los tipos de interés mundiales y la crisis energética. Sin embargo, su visión de optimismo, crecimiento y cambio era acertada”, expresó Kwarteng en una sentida carta publicada en su cuenta de Twitter.