A diez años de la muerte de los ochos bomberos y dos rescatistas de Defensa Civil por el derrumbe de una pared mientras combatían un incendio desatado en el interior de un depósito de la empresa Iron Mountain, en Barracas, las familias de las víctimas exigen el inicio del juicio oral que condene a los responsables, aunque reconocen que su lucha es "contra molinos de viento".