Se ha difundo, desde que el presidente anunció las nuevas restricciones a la circulación, una falsa y ridícula dicotomía, como si se tratase de actividades asimilables o antitéticas, entre las clases presenciales y el fútbol.

La clases presenciales se suspendieron y la actividad deportiva profesional llamada fútbol no. Pero las actividades no son comparables ni excluyentes. Tampoco se suspendió la venta de cigarrillos de 06 a 19 hs. y no fue esa actividad fruto de la ridícula comparación.