El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, adelantó que la semana próxima la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunciará “un reconocimiento económico y financiero a los miembros de las fuerzas de seguridad nacionales, de los cuales 12 mil agentes fueron movilizados” para cooperar con las provincias que así lo requirieron en el marco de los conflictos policiales que derivaron en violencia y saqueos.

“Gendarmería Nacional, a través de sus hombres y mujeres, Policía Federal, Prefectura y Policía de Seguridad Aeroportuaria han podido acudir en requerimiento de los gobiernos provinciales, de un modo complementario, para proteger a los ciudadanos de las provincias”, aseveró el jefe de ministros en su habitual contacto con la prensa de las mañanas en Casa de Gobierno. Capitanich aseveró que “el financiamiento del sector público está garantizado. En el caso concreto de la situación fiscal del país, veo que muchos diarios ponen en tema el tema del rojo fiscal. El financiamiento del sector público está garantizado”, señaló.

Sobre los desmanes perpetrados por hinchas de Boca en el centro porteño en la tarde de ayer, el jefe de ministros remarcó que "la única fuerza que intervino fue la Policía Federal", a pesar de que la Ciudad de Buenos Aires "es el único ámbito compartido entre esa fuerza y la Policía Metropolitana. Tuvimos que actuar con ausencia de otras fuerzas", subrayó.

En otro orden, reiteró el reclamo de investigar judicialmente los hechos de violencia y los conflictos policiales desatados en algunas provincias la última semana para determinar autores "materiales" e "intelectuales", y sostuvo que, aquí, "nadie puede lavarse las manos". En este sentido, Capitanich sostuvo que las fuerzas de seguridad de algunas provincias no sólo "no cumplieron con su deber de salavaguardar la vida, la libertad y el patrimonio de los argentinos sino que, además, han promovido directa e indirectamente saqueos".

Al ratificar que la responsabilidad primaria de la seguridad en cada provincia es de los gobernadores respectivos, insistió en que "el gobierno nacional no puede subrogar la responsabilidad de cada provincia. Cada gobernador tiene las atribuciones para conducir a sus fuerzas de seguridad y establecer estrategias. La incumbencia es de cada gobernador", adujo. En ese marco, el funcionario agregó que "a requerimiento de cada gobernador podemos establecer mecanismos de cooperación, pero la responsabilidad primaria y esencial en la política de seguridad es de cada gobernador".