Luego de la devaluación decidida por el Gobierno, las petroleras comenzaron a subir los precios de las naftas. Shell y Puma fueron las primeras en remarcar los valores en los surtidores de todo el país, con incrementos del 12,5%.

Hasta el martes 15 regía un acuerdo de precios entre las petroleras y el Gobierno para definir de manera conjunta los aumentos en los últimos meses. Finalmente, con ese arreglo vencido, las empresas estuvieron en condiciones de definir de manera unilateral sus aumentos.