El Relator Especial de la ONU, Dr. Leandro Despouy, editó su último libro “En defensa de jueces y abogados. Informes 2008-2009 al Consejo de Derechos Humanos y a la Asamblea General de las Naciones Unidas”.

En Bravo.Continental, el letrado precisó que se trata de un libro con “una doble mirada: no sólo supervisamos la justicia en el mundo sino que lo hacemos a través de parámetros internacionales estándares que nos sirven de referencia para evaluar cada uno de los países”.

Además, dijo, “se trata de intervenir en cada una de las situaciones donde se violan algunos de estos principios o en casos particulares de abogados, jueces, fiscales, que son objeto de presiones en lo que es un valor universal que es la independencia de la justicia o de las instituciones”.

Independencia Argentina. “Acá hay una situación muy paradójica. Vemos que hay jueces que superan las presiones o condicionantes de distinto tipo. Pero también existe un fuerte deterioro en algunas ramas por intimidaciones del poder político o el Estado”, señaló Despouy.

Asimismo, remarcó que “estas siguen siendo profesiones de riesgo. En Argentina lo han deteriorado al Poder Judicial: aquella célebre instancia donde (Carlos) Menem estableció el sistema de los jueces operadores políticas con total discrecionalidad dañó mucho esta área”.

“La nueva constitución de la Corte Suprema significó un paso decisivo en la recuperación de la credibilidad. Sin embargo, quedan muchas cuestiones aún por resolver”, sostuvo.

Despouy, en tanto, reiteró sus críticas al funcionamiento del Consejo de la Magistratura y al sistema de elección de los jueces. En ese sentido, afirmó que los últimos cambios generaron “un enorme descrédito que afecta a todo el sistema judicial”.

“Si hay un poder que debe tener prestigio y autoridad es precisamente el que custodia nuestros derechos humanos”, afirmó el letrado.