Gregorio Dalbón, abogado de gran parte de las víctimas del choque de trenes de Castelar, insistió por Continental en que Daniel López, conductor de la formación que embistió a otra que estaba detenida “cometió una negligencia muy grave”. En la Mañana, acusó a los gremios ferroviarios de “haberles mentido a las víctimas y a la población” al decir que los frenos no funcionaban. También fustigó la “pésima y demagógica instrucción del juez Bonadío”.

“En mi opinión, la instrucción de la causa de Once fue pésima, hecho por el cual aún no tenemos una fecha cierta para el debate oral”, dijo. “Las partes hemos sido notificadas de nuevas medidas de prueba ordenadas por el TOF 2, por lo que estimo que no podrá iniciarse el juicio antes de que transcurran 6 meses. Más allá de las medidas, están las nulidades presentadas con todo derecho por la defensa y entendibles en una instrucción pésima”, agregó.

Para Dalbón, Bonadío “tomó por parte querellante al Estado, pero luego la Cámara lo revocó y lo quitó porque no podía ser querellante. En segundo lugar, Bonadío sobreseyó al maquinista, que es equiparable al que tiró la bengala en Cromañón, pero la Cámara lo revocó y lo procesó por estrago culposo. En tercer lugar, Bonadío manifestó asociación ilícita entre el Gobierno y los empresarios concesionarios, pero la Cámara lo revocó”, resumió.

Para el letrado, Bonadío “juntó tres cuestiones que no pueden ir juntas”, como es la responsabilidad del maquinista, la responsabilidad política del Estado nacional y la cuestión de los subsidios al transporte, “y terminó embarrando la causa” con la consecuencia de que “Castelar llegará a juicio antes que Once”.

Según Dalbón, “la gran diferencia” entre ambas causas es aquella que existe “entre un juez que embarra la causa y no se puede vislumbrar la fecha de juicio oral y un juez que ha avanzado de forma limpia, permitiendo una pericia amplia y transparente, donde el camino que queda por delante es el juicio oral que seguramente se va a adelantar”.

“Si creemos que el maquinista es sordo, ciego y mudo, estaríamos ante un imprevisto. Pero si era un eximio motorman con vasta experiencia, tiene que ser algo más que negligente para ocasionar este daño”, advirtió sobre la actuación de López en el siniestro ferroviario. Finalmente, rememoró “los tiros en las piernas a Pino Solanas, los trenes incendiados, la vía rota a propósito como antecedentes de sabotaje. No descarto el sabotaje. Pensamos que la conducta pudo haber sido intencional. No creo que sea solo por negligencia y nos gustaría investigar la rama sindical, ni más ni menos”, concluyó Dalbón.