Lautaro Cárdenas, de 16 años y su amigo Gonzalo Aranda de 15, fueron atacados por delincuentes a bordo de dos vehículos cuando regresaban de una fiesta la mañana del domingo, uno de los adolescentes se encuentra intubado, con fractura de cráneo y hematoma epidural.

Los jóvenes caminaban una distancia de cinco cuadras cuando fueron interceptados en Cid Guidi de Franc y Zamora, en el partido bonaerense de Lomas de Zamora, por un Volkswagen Bora gris y un escarabajo amarillo, cuyos integrantes les preguntaron por una panadería con el fin de despistarlos y luego bajarse a robar sus pertenencias.

“Le frenan dos autos, los empiezan a insultar, ellos los ignoraban y salen corriendo, mi hermano se va corriendo y ve que entre tres le pegaban al amigo, entonces vuelve a ayudarlo y recibe tres golpes en la cabeza con una botella de vodka”, dijo Alan, hermano de Lautaro a LN+, desde la puerta de la Clínica La Sagrada Familia, en Belgrano.

“Mi hermano me llama a las 6.40 que le habían querido robar a él y a el amigo, tienen 15 y 16 años, ya era de día, tenían que caminar solo cinco cuadras. Nunca te imaginas que puede pasar algo así”, agregó el hermano del joven intubado. Al momento de regresar a su casa después de la agresión, los menores se encontraban bien y se acostaron a dormir. Posteriormente, Lautaro se levantó y comenzó a vomitar, a desvariar y desmayarse lo que encendió las alarmas entre sus familiares.

Al trasladarlo a una clínica de Lomas de Zamora, evaluaron con una tomografía que el joven tenía un hematoma epidural, es decir, sangre en la parte interior de cráneo y la cubierta externa del cerebro. “El médico nos dijo que el caso era muy grave, que tenía un hematoma epidural y que si estaba vivo era porque es muy joven y tiene ganas de vivir”, dijo Alan. Tras la operación, se encuentra estable y hoy al mediodía darán un nuevo parte de salud.

El caso es investigado por la UFI N° 5 y del Juzgado de Garantías N° 4, y trascendió que demoraron a cuatro de los cinco integrantes del escarabajo, a la vez que continúa la búsqueda del Bora. Uno de los delincuentes sería hijo de un policía retirado.