Las autoridades alemanas culminaron una investigación de un grupo neonazi, que formaban parte de una organización terrorista de extrema derecha acusada de planificar un golpe de Estado.

El “Movimiento de los ciudadanos del Reich”, fundado en noviembre de 2021, esta conformado por 50 personas que conspiraban en contra del Gobierno actual, motivo por el cual se arrestaron a 22 presuntos miembros y tres simpatizantes.

“Los acusados ​​están unidos en un profundo rechazo a las instituciones estatales y al orden básico libre y democrático de la República Federal de Alemania, lo que con el paso del tiempo los llevó a decidir participar en su eliminación violenta y emprender acciones preparatorias concretas para este propósito”, informó en un comunicado la oficina del fiscal federal.

Entre los miembros de la organización, se detectaron ciudadanos alemanes y rusos, “Los miembros del grupo comparten un conjunto de teorías conspirativas basadas en narrativas del llamado Reichsbürger y la ideología de QAnon”, afirmó la fiscalía y aseguraron continuar con las redadas que involucran a otros 27 sospechosos.

“El Ministerio Público Federal está investigando una supuesta red terrorista en torno al grupo Ciudadanos del Reich”, dijo Marco Buschmann, Ministro de Justicia de Alemania, y agregó que “la democracia debe defenderse”, lo que se ve reflejado en una “gran operación antiterrorista” que llevan adelante las autoridades nacionales.

Desde que el partido Alternativa para Alemania (AfD) se convirtió en el primer partido de extrema derecha en ganar un espacio en el parlamento en casi 60 años para el 2017, se sospecha que han aumentado los ataques violentos ocurridos en el país.

En el 2020 se disolvió una unidad militar alemana de élite conocida como KSK, dedicada a operaciones antiterroristas y con situaciones de rehenes, después de que se descubriera que algunos de sus miembros pertenecían a un grupo de extrema derecha.

En Febrero del mismo año, se registró un tiroteo masivo en dos bares de la ciudad de Hanau, cerca de Frankfurt dejando nueve muertos. Al respecto, Ángela Merkel expresó que un hombre armado actuó por “motivos racistas de extrema derecha” y este resultó ser el tercer ataque de esta índole en un año.