La Cámara de Diputados dio media sanción a los incrementos impositivos a los vehículos de lujo por 134 votos a favor, 21 en contra y 57 abstenciones. Las compras de vehículos de entre 170 y 210 mil pesos pagarán 30% y no el 50%, que recaerá en los más caros. El Gobierno estima que elevará de 800 a 1.000 millones de pesos la recaudación tributaria por vehículos de alta gama.

El FAP había pedido congelar las valuaciones para definir el tributo y, ante la negativa prefirió abstenerse, al igual que el massismo. Votaron a favor los diputados de Rodríguez Saá y de Claudio Lozano.

Por Continental, el diputado radical Miguel Ángel Giubergia cuestionó la iniciativa porque consideró que “está íntimamente ligada con la política cambiaria”, al tiempo que consideró que “se trata de un simple parche que no arregla los problema de la economía argentina”. En La Mañana, vaticinó que, “a mediados del año que viene, cuando los autos pequeños sean gravados, va a ocurrir lo mismo que con el Impuesto a las Ganancias”.