“El teatro es un gran templo para mí. Me encuentro con un escenario que beso y agradezco todas las noches. Agradezco tener la posibilidad de poder hacerlo, estar y divertirme. Hace 44 años que hago esto que tanto me gusta”, define categórico Jorge Suárez en el medio de una charla a corazón abierto. Se emociona cuando habla. Y emociona cuando habla. Es de esos hombres que no necesitan meterse en la piel del actor cuando llegan al teatro porque vive la vocación 24x7.