Coordinar y concretar una entrevista con Carlos Rottemberg siempre es sencillo. El productor puede estar en Buenos Aires, Mar del Plata, Madrid, New York o en China, pero la respuesta no tarda en llegar porque apenas lee o escucha el mensaje… responde automáticamente con tono amigable. La gente del medio lo conoce bien y su marca personal lo define: es teatrista antes que empresario y desde hace muchos años firma los contratos poniendo el “dedo” sobre un papel en blanco. “Confío en la palabra como primer gesto de garantía”, define convencido.