Pararon de cinco a siete horas los trabajadores del subte. Por Continental, Néstor Segovia, delegado de la línea C, aseguró que desde hace un año y medio reclaman por más seguridad y Subterráneos de Buenos Aires “sólo ofrece doscientos efectivos de la policía y el resto personas de seguridad privada”.
 
En La Mirada Despierta, explicó que “los vigiladores de las firmas privadas no pueden frenar los robos, tanto en los vagones como en las boleterías. Es una medida para ser escuchados”. Aunque garantizó que, “en caso de profundizarse la protesta, no realizaremos una medida ‘catastrófica’”, en referencia a un paro.
 
También esta mañana, otro metrodelegado, Néstor Siris, no descartó que se profundice la medida de fuerza en demanda de mayor seguridad en el sistema. “Nos mantendremos en asamblea permanente esperando a ser convocados al diálogo”, manifestó. Una vez que a las 7 de la mañana los trabajadores concluyeron con la medida de fuerza, se pasó a la segunda etapa del paro: dejar pasar a la gente y liberar los molinetes, ya que las boleterías permanecerán cerradas durante todo el día.