Cuarenta y dos escuelas (cuarenta y una bonaerenses y una porteña) siguen sin clases por las consecuencias del temporal que azotó la zona metropolitana hace un par de semanas.

Además, una veintena más funciona en otras sedes (por ejemplo, se mudó un colegio a un asilo de ancianos) o comparte aulas entre distintos cursos. En total, la situación afecta a unos veinte mil alumnos.

Se estima que las reparaciones "llevarán hasta dos meses en algunos casos", consignó por Continental Fabiana Pérez Valdez, integrante del equipo de infraestructura del sindicato docente SUTEBA.

En Magdalena Tempranísimo, reseñó que “aún permanecen 30 edificios con inconvenientes graves que no permiten el retorno de los alumnos”.