Los jóvenes que fuman marihuana frecuentemente terminan causando daños duraderos a su inteligencia, memoria y capacidad de atención, según concluyó un estudio internacional realizado a los largo de dos décadas.

De acuerdo a investigadores del Reino Unido y Estados Unidos, que estudiaron a más de mil personas en Nueva Zelanda en un período de 20 años, aquellos jóvenes que comenzaron a consumir cannabis siendo adolescentes tuvieron cifras peores en la mayor parte de las pruebas, mostrando un marcado declive en su coeficiente intelectual, IQ.

El informe indicó que alguien que hubiera perdido ocho puntos de IQ en su adolescencia sufriría graves desventajas en áreas importantes de la vida, como la educación y los ingresos.

Los expertos destacaron que aquellos que consumieron cannabis antes de los 18 años, cuando sus cerebros están aún desarrollándose, sufrieron una caída en su coeficiente intelectual.

Durante más de 20 años, los investigadores siguieron las vidas de un grupo de personas de Dunedin, en Nueva Zelanda.

Inicialmente los evaluaron de niños, antes de que algunos de ellos comenzaran a fumar marihuana, y luego los reexaminaron de forma repetida, hasta los 38 años.

Luego de tomar en cuenta otros factores, como el consumo de alcohol o la dependencia al tabaco u otras drogas, como también el número de años que pasaron en la escuela, los científicos determinaron que aquellos que consumieron de forma frecuente cannabis, fumando al menos cuatro veces por semanas durante su adolescencia hasta sus 20 años, y en algunos casos, hasta sus 30, sufrieron un decline en su IQ.

Por Radio Continental el médico Psiquiatra Roberto Sivak sostuvo que "el uso continuado de marihuana facilita la dependencia a otras drogas".

"El uso recreativo es algo socialmente que siempre existió, estamos planteando el abuso de drogas y las consecuencias que traen”, aseguró.