La Corte Suprema bonaerense rechazó una serie de recursos presentados por la defensa y, de esta forma, ratificó la pena contra Julio César Grassi por abuso sexual agravado y corrupción de menores. Ahora la fiscalía del caso podría requerir la detención del sacerdote ante el Tribunal Criminal de Morón, que ya había ordenado el arresto.

El máximo tribunal, de esta forma, confirmó la condena dispuesta por el Tribunal en lo Criminal N° 1 de Morón -luego ratificada por la Sala II del Tribunal de Casación Penal. Por Continental, el fiscal Alejandro Varela aclaró que la sentencia “no quedó firme”, ya que existe “el recurso extraordinario de la Corte Suprema”, que debe otorgar o negar la Cámara.

“Nada es automático, ni irá preso ni quedará en libertad por esta sentencia. Grassi está gozando, hoy por hoy, de una alternativa de la prisión preventiva, que no es detención. Pero a medida que fueron transcurriendo todas las instancias de la causa, la fiscalía fue pidiendo la detención. Una de las condiciones era no referirse públicamente a las víctimas, pero él lo hizo en determinadas oportunidades, incluso al conocido como Gabriel”, explicó en Magdalena Tempranísimo.

“Ante esta referencia concreta respecto a la víctima, la fiscalía pidió la detención. La Cámara de Morón la pidió, la defensa de Grassi la apeló y ahora está en Casación de Provincia, pidiendo que no se lo detenga”, concluyó Varela.