El presidente de Francia, Francois Hollande, insistió hoy en que continuará la lucha contra el Estado Islámico (EI) y la aviación de su país lanzó una nueva serie de bombardeos contra ese grupo islamista en Irak, con la nación de duelo por la ejecución de un rehén francés a manos de islamistas argelinos.

El primer compromiso de Hollande hoy en su agenda, después de retornar de Nueva York tras participar de la Asamblea General de la ONU, fue reunirse a puerta cerrada con su primer ministro, Manuel Valls, y los ministros de Defensa e Interior, para decidir cómo responder a la decapitación de Hervé Gourdel.

Un montañista oriundo de Niza de 55 años, Gourdel fue secuestrado el domingo pasado por un grupo vinculado al EI en Argelia y decapitado ayer luego de que Francia se negara a cumplir con la exigencia de los captores de frenar sus ataques contra el EI en Irak.

"En el marco de una coalición cada vez más amplia, Francia mantendrá su acción de apoyo a las autoridades iraquíes (...) y proseguirá igualmente e intensificará su ayuda a las fuerzas de la oposición siria que combaten actualmente contra los grupos yihadistas", afirmó en un comunicado el Palacio presidencial del Elíseo al término de la reunión.

La nota agregó que Hollande continuará con la lucha al extremismo "con determinación, calma y vigilancia", reiterando la postura expresada ayer por el presidente en su discurso ante la Asamblea General de la ONU, donde condenó el asesinato de Gourdel y rechazó ceder al "chantaje" del EI.

El texto, citado por la agencia de noticias EFE, también informó que París aumentará la seguridad en lugares públicos y en el sistema de transporte dentro del país. Además, ordenó ampliar el alerta para ciudadanos franceses emitida a principio de esta semana de 30 a 40 países.

Entre los nuevos territorios se incluye Filipinas -donde ayer un grupo islamista amenazó con matar a dos rehenes alemanes si Berlín no dejaba de apoyar a los enemigos del EI en Irak-, Indonesia, Malasia, Burundi, Tanzania y Uganda, entre otros.
La otra respuesta del gobierno francés no apareció en el comunicado, sino sobre el territorio iraquí.

Por segunda vez, aviones galos atacaron posiciones del EI en ese país árabe, informó una fuente militar francesa.

Los bombardeos destruyeron cuatro hangares presuntamente utilizados por la milicia para guardar armas cerca de Fallujah, una ciudad al oeste de Bagdad que los islamistas capturaron parcialmente a principio de año, gracias al apoyo de milicias sunnitas locales, que se oponían a las políticas sectarias del entonces primer ministro, el chiita Nuri al Maliki, agregó la fuente.

París envió seis aviones de combate Rafale y tiene desplegado cerca de 1.000 soldados en Emiratos Arabes Unidos, una de las monarquías vecinas que apoya la ofensiva occidental contra el EI e, inclusive, se sumó a los bombardeos de Estados Unidos contra la milicia islamista en Siria.

El viernes pasado París se convirtió en el único aliado de Washington en la campaña de ataques aéreos en Irak al bombardear un centro de logística del EI en el norte del país. Desde entonces los aviones Rafale no habían vuelto a actuar.

Esta mañana, antes de entrar a la reunión con Hollande, el ministro de Defensa, Jean-Yves Le Drian, adelantó que la posibilidad de ampliar esa operación militar a Siria está sobre la mesa. Sin embargo, advirtió que el gobierno galo no tomará una decisión en el corto plazo.