El sacerdote Gustavo Aguilera informó por Continental que todavía resta encontrar a un grupo de compatriotas tras el paso del tifón Haiyan, que dejó un saldo estimado de 10.000 muertes.

“Se está buscando a tres argentinos que no fueron reportados. En el país somos 100 en total y la mayoría somos religiosos, pero hay otros que trabajan en empresas multinacionales”, expresó. “Se supone que estaban en la zona de la catástrofe porque no hay contacto telefónico”, agregó.

El religioso, que reside en la ciudad de Cebú, la segunda más poblada del país, precisó que “no hay comunicaciones, no hay líneas telefónicas, el aeropuerto, las rutas y los puentes fueron partidos en dos, no hay agua ni electricidad”, reseñó.

El Consejo para la Gestión y Reducción de Desastres del país señaló que unos cuatro millones de personas de 36 provincias de Filipinas fueron afectadas por Haiyan, calificado por agencias meteorológicas como “súper tifón”, ya que sus vientos superaron los 240 kilómetros por hora.